La calidad del aire es uno de los factores importantes que favorecen la aparición de la enfermedad. La mayoría de los puestos de trabajos se realizan en locales cerrados o semicerrados, donde se generan unas condiciones climáticas que difieren del clima externo. Los factores que más influyen en el confort ambiental son las condiciones termohigrométricas (temperatura y humedad), ventilación, campos electromagnéticos y las cargas eléctricas ambientales y del propio edificio.

Hay que identificar y estudiar a fondo los factores que intervienen en la calidad del aire interior de cada zona de trabajo, para conseguir edificios que no potencien la enfermedad. Los factores a tener muy en cuenta son la humedad relativa y la temperatura, ya que pueden favorecer el desprendimiento de electrones en unas determinadas condiciones y hacer así que se produzca un mayor número de descargas electrostáticas

La temperatura debería estar comprendida entre los 20-24 º C en otoño / invierno, y 23-26 º C en verano, con unos valores mínimos de humedad relativa de entre el 47 y el 52%. Una humedad relativa baja (por debajo del 47%) favorece la acumulación de cargas eléctricas en objetos. El R.D. 486/1997, sobre disposiciones mínimas de seguridad y de salud en los lugares de trabajo, indica que en los locales donde existan riesgos por electricidad estática, la humedad relativa será como mínimo del 50%.

Se llama descarga electrostática al fenómeno que hace circular un corriente eléctrico repentino y momentáneo entre dos objetos diferentes. Si lo relacionamos con la enfermedad podríamos decir que las mesas de escritorio provocan descargas electrostáticas en los muslos, actuando el cuerpo humano como polo positivo y el soporte como negativo.

La electricidad estática se genera cuando ciertos materiales se frotan uno contra el otro provocando así el desprendimiento de los electrones de la superficie de un material y la absorción en la superficie del otro material que ofrece niveles energéticos más favorables. La capacidad de electrificación de los cuerpos por rozamiento se denomina efecto triboeléctrico y la clasificación de los diferentes materiales se denomina secuencia triboeléctrica, donde encontramos en posiciones iniciales los materiales con tendencia de carga positiva y en puestos inferiores los que se cargan negativamente. De esta manera la diferencia de posición en la lista nos indica que la electrización entre éstos es más intensa. La situación en la lista puede variar en función de la humedad y del rozamiento entre otros factores.